JULIAN SANCHEZ

Curriculum vitae

Poema: Filosofía de la muerte. Cuaderno de Poesía: "Maullando un ideario Proscrito".

FILOSOFIA DE LA MUERTE
 
Dedicado a Eloísa y Abelardo, por ejemplo.
 
Despacio. Los que han llorado, dicen que es lenta.
Bruma primero, andanza mortecina,
cenital cansancio, otro dormir inmutable.
Los cerebros expertos dicen que no duele.
Murmullo plácido, dejar la mirada sin mirar.
Teorías del instante, la fe y la garrulería.
La muerte. Amenaza en el horror y onírico fraude de Fausto.
Ser Mefistófeles o Idea en un imaginario
materia, física, extensión y espíritu.
Los cementerios y crematorios, construcciones de lujo
filosofía de la muerte del 2000 son.
 
Rostro de pergamino en un cuadro,
muerto, muerte, leyenda y personaje bretón o piel roja, ¿ importa?
 
La filosofía de la muerte es una circunstancia
con sus tendencias, de angustia, escepticismo, miedo o placer.
Lentamente, como excusa del buen vivir, morimos actuando en este teatro.
Morimos y vivimos. Ya está.
 
5 de Febrero de 1997
 
 
DEL CUADERNO DE POESIA: " MAULLANDO UN IDEARIO PROSCRITO "
LEMA: " PARA NO TRASMITIR UN FRIO MUTISMO "
 
FLORES Y PETALOS EN EL TIEMPO
 
En el tiempo en que una flor sea quemada
arder el paladar y la palabra escrita estar hundida.
Maquiavélica aseveración sin tristeza ni esperanza
como desnudos pétalos con apariencia mística,
labios corridos y el velo de una muerte
a punto de encubrir los otros sueños,
de los que se habla y no son acto
de los que amargamente huímos sin posibilidad
porque son la tumba prisión del momento.
 
En el tiempo en que la voz se piensa
todo será inútil, obtuso y una broma;
el mal gusto del engaño, de la traición material
de estas flores que somos sin aceptar la temporalidad.
 
..Palma de Mallorca, del 11 al 19 de diciembre de 1995
 
 
LA CONCIENCIA DE LA CIUDAD
 
Asustados bloques de ilusión de esa filosofía cuarteada
que pudo ser moralidad absoluta; clavo ardiente
en el montacargas del pensamiento.
Con la reflexión y la imaginación cual ridículas mariposas de consumo.
 
Nuestro labio inferior soporta el peso rígido del desaliento,
la dureza cautiva del escepticismo.
Para los almanaques causales la sangre es una sustancia,
corre por Sarajevo como en Marruecos o Harlem,
la mierda se trafica igualmente en el Arenal, Vallecas, vida es del submundo.
 
Como una triste Luna, canción poco melódica,
la omnipresente humanidad no es odiable, ni reparable.
Los asustados bloques de ilusión pacen calmados
en las estancadas aguas de la socialización.
 
No arreglamos las cosas, ni cansamos al poder con la poesía,
puede que culturicemos el retrato con otra palabra,
idea que desmaniatiza el cutre esqueleto de la moral.
Ejemplos de poetas hay tantos. Angel Crespo es uno.
Porque muchos poetas no caen, no son tumbas,
él es poética optimista,
ganable grano del bloque de ilusión, cultura entrañable.
Exorcizador literario del mediático compromiso de este vasallaje.
 
Aparecer y desaparecer así, por su conciencia de ciudad,
entre las luces de las calles que en según que épocas son vampiros estáticos
 
El Jameson sabe a roble,
corazón de agua.
Descuartizados los últimos canutos
las estrellas brillan igual.
Personalmente coceas un poquito de soul en el Compac Disc,
en la lejanía árboles metálicos inyectan sobredoisis de imagen al espacio.
 
La ciudad, inmune a este movimiento,
florece bella en ese lenguaje histórico,
florece y se calla ya.
 
Palma de Mallorca, 26 de diciembre de 1995
 
 
HUMANA CONTEMPLACION
 
Gimoteable especie a causa de un egoísmo ancestral,
ancestro penitente del discurso del miedo,
del cocido de palabras sin combustión
de incierto prisma de guerra.
 
Permutamos una crítica contínua a la destrucción y el placer de la inmoralidad;
valoración nihilista antiparadójica
dogmática y demagógica ética de tradición y de costumbre,
son en la historia la arqueología de su caminar.
 
Modernos contratos sociales suscritos con una falsa demencia
que dicen los filósofos y bienpensantes llora un ritmo armónico.
¿Dónde caben el agua, el fuego, la tierra y el viento?
 
Feligreses del deseo, acústicos inventando pasiones y sórdidas solidaridades
siempre tejiendo desde el propio hilo de arañas descontentas
sin aceptar la realidad.
¿Cuál es la guerra en esta humana contemplación?
Estar en guerra consigo mismo
dijo una vez un borracho
adormilado en una barra marrón
siendo y no siendo un espejo,
mezquino de sus vómitos y vampiro de su higado.
 
Cruzamos una fertilidad desértica
cuando el código genético es la técnica informática más cruel.
Es el recuerdo, el sanguinolento estigma,
el floclórico parecer en la cábala de la sacrílega idea.
El miedo es el comodín de la autodestrucción.
No lo dijo ni un poeta, ni un borracho,
ni una prostituta o el clérigo maldito
ni la hierática figura de Tutankamon.
La poesía es el miedo de la palabra
del lenguaje, de esa factoría que es la humanidad
alcohólica en su intacto orgullo
y la psicología transhumando pamplinas
acuerdos y sanciones, bloqueos y malicias.
 
La humanidad no es un viejo diablo,
no es una tumba ni aspirante a trotamundos,
no puede definirse con aprecio o injusticia inmunda.
El canto más escéptico le permite ser viva duda,
y como duda, cumbre sin culto a la creación
a ser insumisa con la naturaleza
que eyacula sus leyes sin control en pos de la razón.
 
Salimos a la calle, apagamos el corazón en las sombras
mojamos suavemente las espinas de los labios,
mientras entre las estrellas se oye el más arcaico y gutural placer:
Ser y ser vivo.
 
Palma de Mallorca, 3 de enero de 1996
 
 
EL VIAJE, EL LUGAR
 
(DURANTE LA LECTURA DEL POEMARIO PERO EL VIAJERO QUE HUYE, DE M.V.MONTALBAN).
 
El viajero interpreta como desesperación el crujido del mar
en la ruta que le abre el viento hacia la arena,
en el escodite del cielo y las estrellas cuando es espejo.
Pero el ruido es la línea del viaje, del planeta.
Eso no cambia aunque haya muerte viviendo en su fondo.
 
El hombre es el perfecto estrangulador de los caminos,
del dolor de las tinieblas y del rito del sexo.
 
El lugar siempre existe.
Las mochilas se acumulan empíricas
sólidas o en la niebla del anochecer mediterráneo por ejemplo.
 
El viajero es un viaje, columna de humo y consumo,
billete de embarque en el ascensor y en el prostíbulo.
 
Putas, macarras y VIPS,
Asia y Africa, pervertidas como muchas otras.
El viaje no tiene tiempo de ser
guarda en su maleta el embrión revolucionario
el que asesinar agencias y turoperadores,
el que fornicar con el ECU y la nueva gran Europa.
 
En el tiempo el mar sigue esperando un enigma
venganza del huracán, hielo, sal, fuego y tierra.
 
El viajero sube al avión, coge un taxi
y se despierta incluído en la oferta.
 
Playa del Arenal Palma de Mallorca, 23 de enero de 1996
 
 
A DURAS PENAS (SEXO A DISCRECION)
 
Han huído las novelas rosas a la trastienda.
Comemos sexo como si defecáramos mentirosamente.
Bacalao a la carta en Titos, Celes Pub e Ipanema,
Show Girls, película de trágicos sentimientos
de esperanzas de cartón y luminosos,
carne para preservativos cerebrales
reprimidillos con premio al video-tontón.
 
No es tremendísimo que le quema al poeta
que le jode las entrañas en las calles,
a la luz de las esquinas ocupadas de violaciones
menores cutrerizados, prostitutas y almas proxenetas mutiladas.
 
Es sangre, como dice Xavier Vellés en su libro,
sangre en Mostar,
sangre de sueños de amor sin miradas abiertas.
 
Corazón juzgando entre galerías, créditos traidores,
en las Bahamas y las carantoñas de Julio Iglesias.
Pero bueno, acabemos la cosa
contaminados de Sida si tenemos suerte viviremos a duras penas.
No es solo sexo el amor, ni amor del sexo,
mohín puteril de ocasión, alejado de tapujos y "calendas".
 
A duras penas besamos a nuestros amantes sin que nos muerda la cosmética.
No es guerra de sexos manipulada tampoco
que eso pudiera calmar los versos,
es como el viento cuando golpea sin frío
una muerte antes de bajar la cremallera.
 
Vehículo a ruedas, Palma, Plaza España, 6 de febrero de 1996
 
 
CALLEJONES DE ODIO Y DE ESPERANZA
 
(Dedicado a Ximo, de la revista "KASTELLO", en Castellón, antes de su carta)
 
El dolor es un desierto compartido, extrema soledad azucarada
comedido productor de neurosis en el presente
que en el pasado no se estaciona y siempre acompaña
año por año, del vientre al nicho.
 
El dolor es una causa incomprendida,
fijo baremo introspectivo y eterno invierno del corazón;
maldición cautiva en un paquete de odio, de insolidaridad extrovertida
financiado hastiadamente como arma de doble filo.
 
Un nuevo nacimiento garantiza una l grima de pasión
un cubil de dicha y la promulsión de nuestros estereotipos.
Después de los primeros chillidos auspiciados paternalmente
el dolor neutraliza la naturaleza extendida,
contaminando de rabia la felicidad más vívida.
 
La esperanza se introduce y es deseo sin límites,
como brote de hierba regado por el sol y un cielo azul marino,
cantarina agua que nace de una montaña
músculo en tensión, amoroso claustro de imágenes variadas.
 
Entre dos categorías estigmatizadas
el miedo existe entre los hombres, náufrago o prófugo,
angustia y abulia son su norte,
presión que chafa la belleza de la especie,
dolor instantáneo nostálgico de un jardín prohibido
donde el reparto de limosnas es una utopía degenerada.
 
 
NO OYEN VUESTRO RUIDO
 
 
Viento de pasión te protege niño.
El mar no duda en frenar la belleza de la inocencia,
en ocasiones es loco y satírico.
 
Sátira de robo entre colegas, juego de tardes
arando la conciencia que aplauden los barrotes.
Cerca de ese mar, muy cerca, te exprimes los años
delicuentes de sillones ciclistas,
sonrisa pícara y chulesca
sonrisa de cadáver sin amigos.
 
Te nos escapas. Nos atan el informe,
os dejan como voceros de los pobres
"pardillos" ilusos, solistas del hospicio.
No tengo piedad ya en mis poemas,
solo transmitimos un frío mutismo.
Sordos, sordos están, los que pueden sanar el medio,
sordos, podridos, encías hincadas en el "pastel",
algas que ni el mar, punteado en rojo a las 6 de la tarde, soporta.
 
Aires de claustrofobia seleccionan esta simiente,
joven estrategia solitaria que como olas en tormenta
se aparcan en la jungla del supermercado,
claudicando al mundo antes de expresarle su venganza.
Niño colega. Agua desvahida. Final entre las sobras de una mariposa muerta.
 
S' Arenal, Palma de Mallorca, 26 de febrero de 1996
 
 
CIRCUNSTANCIAS SIN CUADRO
 
(Dedicado a mi último poemario Cuadro de Circunstancias)
 
 
Esto es un bar. Es de noche, no importa ni la cifra del día,
ni el día de la semana.
Bebo cerveza por no beberme los mocos
del pensamiento que podrían coagularse y joderme los sueños.
Los pocos sueños que tengo.
 
Estoy impresionado por el cadáver que es mi vaso vacío.
Un modelo Diamond de tragaperras
rasca las tentaciones del último espacio.
Juego, pierdo. Juega otro, pierde, nos perdemos.
Winston, marca registrada Wurlitzer, su tabaco gracias.
¡Tú tabaco capullo!
Imagino que fliparía el indisimulable burgués que se pilla un Nobel.
Hago propaganda de mis eructos no emitidos.
 
Están sordos en el bar, están cabizbajos,
"Coke", 007, "Picar es un placer".
El placer de estar sentado recordando a mis sintéticos compañeros,
recordando el desconocido recuerdo de la madre que me parió,
que es una buena mujer.
¡Madre no hay más que una!
Música... ¡EXTREMODURO!,
en el extremo de la barra mármol/mierda
un guiri psiciplasta fuma su juerguita.
Me dice en una carta alguien que es:
"La poesía española no vende!
¡Me cago en Dios!
No es la primera vez que me cago.
Bokwsky, Baudelaire, Barton Fink, baptista
bala perdida, bla, bla, bla.
Ha pasado un cuarto de hora.
Han pasado varios milenios.
El autobús no pasa:
¡Quiero conocer a Caperucita Roja y matarla por estúpida!
 
Los finales felices estropean los cuentos.
Los finales felices no existen.
Final.
 
7 de marzo de 1996, Palma de Mallorca, barra de un bar, meditando taciturno.
 
 
PASEANDO UNA DOSIS INUTIL DE NOSTALGIA.
 
 
Una causa ecléptica, un talismán podrido en el corazón.
Recuerdos. El fascismo tiene leyes europeas.
La isla es un grado a estribor del infierno.
Maldiciones, rubias fornicaciones a precio de saldo
y una bala de labios naranjas entre el mar y Matu....tano.
Territorios cohíbidos. Niños hechos hombres,
destierro de simiente gitana,
indefenso barrio de humedad piedra,
Sa peña y descarga. La frente no encaja,
no cuenta, no se cierra.
Eivissa, memoria, Baleares, vergüenza desastrosa,
indecencia por almas quemando cigarros de hierba.
Los rumbos, caminos sin fondo aquejados de poetas
clave en swing, blues y 45 temas.
Amigos, sumos de infartos y trompetas.
Alcohol, consejero de la música cenicienta prostitución sin reglas.
Abandonados en islas de vidrios
quemados por el destape de la naturaleza.
besos, muchas cenizas que se hacen rumbo
un crudo invierno para el negocio,
una sonrisa estimulante.
Sube y baja el avión.
Recuerdos, soledad, un amor coyuntural.
¿Quién se vendió al diablo?
¿Cuántas veces de la nariz cae hiedra?
No, me digais que no teneis lengua.
La cordura os la prestan digitalmente.
No digamos más cosas,
Ibiza o la jodida mierda del sistema.
 
Todo un camino,
la música nos delata cómplices.
La risa se enorgullece otra vez cínica.
El recuerdo es peor que los deseos.
 
Es una ilusión momentánea y efímera,
una nube de lluvia mal parida.
¡Música y diversión, alcohol sin permiso!
 
En la noche no importa como está la puerta.
 
Eivissa, 16 de marzo de 1996
Hoy es mi santo, mañaana es la tumba de mi presente y del tuyo también.
 
 
MAULLIDOS SIN TRISTEZA Y CON CERVEZA (Intimando por ahí)
 
 
Una urgencia de nuevo entre las cejas.
Es como un peso irresistible. Un escozor de la naturaleza.
Escribir, crear, crispación existencial,
natural ventaja que no ocupa al ciudadano medio
ni al medio floklore del barrio.
 
Nacer en comunidad, cacho a cacho las conversaciones,
las lágrimas y el asfalto fósil de un moco de niño.
La ingenuidad se aprisiona lasciva en la palidez sin precio de folio,
del comunicado infame del anochecer de la primavera.
 
Vereis, besos se dan muchísimos,
sin pensar la mayoría, cotizados en el amor depende del video club o la fantasía.
 
Escribir es casi un estado de voluntad
del cual se aprovecha todo como del cerdo.
Surge, sucede y se estimula grave,
se busca un cambio onírico en el abstracto mundo
pues todo cambio, como adivinó Pessoa, es mental.
 
Se busca en el límite del papel,
observando el pozo de cerámica donde fundimos cáncer y nicotina
el claustro colorido de la penumbra
la sombra mema de la humanidad;
se taladra una propuesta sin acción.
 
Más relajado el sfinter emocional
el poema cunde en este caso de sopa de letras.
 
Buscar jorobadamente un mensaje, la canción del verano,
y la putadita del taxista que baja antes la bandera.
Queremos ser trascendentales y nos es natural la pamplina.
¡Qué el diablo se vista de blues!
¡Qué los amigos soporifen los versos en los bares borrachos de pasión un ratito!
 
Se inició el viaje ya lejos de una triste mano de cerveza,
que era escéptica, cautiva, pero sonriente.
Vivimos tiempos de abulia
en un escenario no preocupante sino patético.
La cerveza que pensaba real blues y rock...
 
Amigos hermanos humanos, hermanos de la historia, salud, huellas sin plazo,
a estas horas seguro que...
 
Escribir para el privilegio de unos pocos bardos
con los labios en el pulgar, a 100 por hora,
pordiosero de razones, tiempos y palabras.
Garabatos y circunstancias, maullidos de un proscrito ideario
que ya es lunar en la piel de tus ojos.
 
11/18 de abril de 1996. Palma de Mallorca, Barcelona, Palma
 
 
EL CUENTO DEL BORRACHO
 
 
El cuento del borracho es el canto del caldo etílico sublimado.
Se despierta arruga entre arrugas de tela.
Desayuna con soledad diamantina,
atardece en la angustia, en la cárcel de su sombra.
Crónico aparato humano sobre el culo de vidrio
en una barra de la que es mendigo de amor,
en la cuadra que es el vómito de las horas,
la nostalgia comprimida, la nostalgia inmolada.
 
La angustia del borracho es un soneto de cartas marcadas,
se repite la baraja, se pierde la partida no se stremece ni un tejido de la manada urbana.
Un reloj a prueba de bombas, una crónica de uñas mordidas
esperanzas castradas, romántico beso a la Luna,
a la palabra que suele ser su amada.
 
La palabra es el deseo de una expresión tartamuda,
ciega culebra que se siente bastarda.
 
El cuento del borracho camina sin exorcismo probable.
El borracho se bebe el mundo, tose apoyado en la pared
bailando sin música al lado de un container y entre el celo de los gastos.
Vuelve a ser arruga de pensión barata que es su vida.
 
Pero se siente tan cerca su aliento,
se cubre las espaldas uno
y sin embargo se palpa un hedor estético.
 
Dicen las cenizas y las máquinas que nacemos borrachos de razón
y que cuando salvamos los obstáculos
se nos prohíbe el último trago.
El cuento del borracho es mejor,
no es ni triste ni bello.
Es la calma vagabunda que hace de unas cuantas conciencias
la canción o el canto de un especial misterio.
 
27 de abril de 1996
 
 
LUMPEN DE ABURRIDOS
 
 
Los más brillantes poemas escritos por eruditos.
Crónicas críticas de consagrados mastodontes
prólogos magnificientes que edita el aristocrático saber.
Poesía, ¿Dónde vas?
 
El poema, caricia, valle fecundado de auroras
y voz probablemente de la vida a la muerte,
del sinfín de ríos de estiércol,
de venas pinchadas, mujeres apaleadas
introvertidas depresiones enfermas.
Las más bellas frases de ideas y caras blancas
insinuosas tertulias de radio y ojeras cocaiónomanas.
Un lumpen de aburridos nos persigue,
traza un sendero consumible de arte,
un puticlub errante nadeando su nada.
Hay poetas que tienen la "boca llena",
y flores con los pétalos sangrando saliva,
plantados en charcos donde las ratas y la herrumbre meditan.
 
Meditan sobre la esquizofrenia
y el efecto de las radiaciones a ritmo de la mierda más tierna.
Poesía, birria escenificada,
polvoriento desierto donde el sol se muere.
¿Quién te entierra un poco más cada día??
¿Cuál es el esfuerzo que hay que hacer para no amedrentarse?
 
A la luz de una mueca jóvenes smokinados
esperan que el semáforo cambie cromáticamente.
Cambie como cromo de poco lujo
arrancado al paraíso cifrado en letras bancarias.
 
Las más desalambradas estrofas son una encrucijada,
un robo y una joven que dejó su alma en la peluquería
o la amiga desenganchada de su país,
cuidando la prole graciosa que promiscuamente los padres le enfocan.
 
Menos mal que aún tenemos premiados escritores,
hermosas obras que el lumen de aburridos acuña.
 
Poesía busca poeta que la chulee
y cambie los fósiles de un gusano en la lápida
por un poquito de aire contaminado
aunque sea cohibido, nada valiente, fuera de escena.
 
2 de mayo de 1996
 
 
EL RITMO DEL AMOR
 
 
Vamos muy acelerados por los labios de la rutina
y no hay tiempo para una pausa después del resentimiento en el amor.
 
El amor, mayeústica libación de lo oscuro,
del prohibido sabor
a agua estancada, canal sucio, verdugo menopáusico,
doliente juego filosófico del amante y del amado.
 
El ritmo del amor, suspiro y extroversión,
mirada irracional, cosquilleo de la cultura,
ajeno al discurso cultivado de la ignorancia,
entre melodías trémulas, jardines parsimoniosos
y mezquinas danzas de sombras y soledades,
en los que la angustia reina más de un día.
 
Sorpresa y jornadas en los umbrales del imsomnio,
ceños fruncidos de arrugas y entrecejos,
pasamos enclaustrados en la alienación social
como un fugaz taller de consumidores proscritos de la vida,
competidores de un sueño, una mirada y un suceso pasado.
Pedagógicamente castigados en un cruce de cables,
sistemáticamente prendidos como pinks de formas.
 
El amor busca sus huellas y se emula glorioso,
mir ndose en su entierro como el "estudiante castellano",
de furor como melodía nítida
más bien, abstracta nube impávida.
 
Palma de Mallorca, 14/16 de mayo de 1996
 
 
BRUMOSO SILENCIO
 
 
El silencio del ruido. Brumosa niebla infectada de agobio,
abulia desoída que hace infectar las barriadas.
La comunicación es un arrugado pergamino
retroalimento de angustia.
 
La población sufre, la calle es una cabronada espectante,
no cuenta, calla y absorbe la escena cotidiana.
El tiempo ya es un baúl en que ya marchitan los sueños
cualquiera que fuese su estereotipo.
 
Hoy un sueño se fabrica en stereo y se escucha en dual,
pero siempre existe entre las ventanas, las antenas y los balcones un tácito acuerdo
que no pronuncia a gritos la desesperación,
pero entre sus cimientos, en silencio, nace el ruido del desencanto,
del cual enfermizo convertido en muerte,
la última causa que hace rebelde al paleto.
 
Es hermosa la crueldad de las cosas
y ruidoso el perfil de la realidad cansina.
Nunca mereció la cobardía
y sin embargo hemos asumido su cultura,
silencio que carcome los pútridos refugios contra el miedo,
silencio del ruido, silencio que camina.
 
21 de mayo de 1996
Sin Paul Simon y Art Garfunkel

CURRICULUM VITAE
 
NOMBRES Y APELLIDOS: Julián Sánchez Caramazana
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO: 11 de Agosto de 1962, Barcelona, España
ESTUDIOS REALIZADOS: Licenciatura en filosofía política por la Universidad Autónoma de Bellaterra en Barcelona.
LABOR ACTUAL QUE REALIZA: Educador de calle del Ayuntamiento de Palma de Mallorca.
OBRAS PUBLICADAS/OTROS DATOS DE INTERES: 1990 Edición junto a varios autores de sendos poemarios, editados por el Casal de Joves de Horta, en Barcelona. 1990/93 autoedición de 3 poemarios "El blues del canto pordiosero"; "Otros tiempos"; "Otras razones, otras palabras", con una tirada de 100 ejemplares por título. Edición en 1990 de una cinta de poesía musicada titulada "Altres Camins". 1994 publica libro de poemas "La triste mano de la cerveza", (editorial "La mano en el cajón"). 1996 publica el poemario" Cuadro de circunstancias",(editorial "La Céllula").
Premio de Poesía "Reina Amalia 97 ", en su XXV convocatoria, por " Lecturas- Votaciones" con el poema "No oyen vuestro ruido".
Es colaborador desde 1990 de revistas; rotativos; periódicos; prensa alternativa especializada en cultura; poesía; temas sociopolíticos; trabajo social y debate; análisis ético filosófico.
Colabora en la sección de Tribuna del periódico balear "La voz de Baleares".
Miembro del Colectivo de arte independiente "COBAI", que realiza trabajos socioculturales de difusión, distribución, contacto e intercambio de información, en materia de arte independiente, en la Península Canarias; Cuba; París y México
En Baleares organiza espectáculos poéticos y teatrales.
DIRECCION PARTICULAR: C/ Toni Noguera, 1 2ø F, 07007, Palma de Mallorca, Baleares. España. Teléfono: (971) 421360

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