FELICIA
HERNANDEZ LORENZO
Curriculum vitae
Poemas: Paisaje
Marino. Poeta. Todas Ellas. Con la humildad en el vivir de
siempre. Soledad. Esa bestia felìz. Maledicencia. Mis hermanos. Los puntos cardinales. Disquisiciones en la fiesta de un
amigo.
Del libro "Con irreverencia y
gratitud." Llueve sobre la Ciudad. Homeless.
Soliloquio. Eclipse. Afinidad. Reliquias.
- PAISAJE MARINO
- Para Josè Blanche
-
- De este paisaje, vuelo de gaviotas,
- profecìa de playa en lotananza,
- de este paisaje pleno de esperanza,
- la proa rumbo a costas muy remotas,
- ruedan y se desprenden como gotas
- verde-azules o grises, la confianza,
- y la serenidad, y la bonanza:
- Tocar puerto a pesar de velas rotas.
-
- Ah, què visiòn, que lìmpidos los
trazos...
- hacia la claridad eterno viaje.
-
- Olvido mi velero hecho pedazos
- al embate del viento màs salvaje,
- sostengo el maderàmen con mis brazos
- y navego en tus ojos... què paisaje.
-
- Abril 1993
-
- POETA
-
- Tienes con luces pequeñas
- dibujadas las pupilas:
- Un ojo abierto (vigilas)
- y el otro cerrado (sueñas).
-
- En cada verso diseñas
- tu sentir como orfebre.
- y aunque la fe se te quiebre
- a cada ilusiòn que parte,
- no haces sino amar y darte
- pura lumbre, todo fiebre.
-
- Marzo 1995
-
- TODAS ELLAS
-
- Aquella que aguardaba primaveras
- con un candor senil, tan inocente,
- aunque nunca el amor tocò su frente
- màs que con la ilusiòn de las solteras.
-
- Quien tejiò y destejiò tantas quimeras
- sòlo pensando en el esposo ausente.
- Quien añorando el bien de la simiente
- tuvo suerte de estèriles higueras.
-
- La de los hijos hèroes o traidores;
- la de mil y un augur en el serrallo;
- la suicida del rìo entre las flores;
- la dueña del honor de Don Rodrigo;
- la que pasò desnuda en su caballo...
-
- Todas ellas en mì, todas conmigo.
-
- Noviembre 1993
-
- CON LA HUMILDAD EN
EL VIVIR DE SIEMPRE
-
- Con la humildad en el vivir de siempre
- mi madre se ha sentado a la mesa
- la espalda bajo el tiempo y el sueño que
no vino
- mi madre come arroz mojado en leche
- mientras voy contemplando el modo en que
su mano esboza el gesto
-
- ella se duele de extraviar la suerte
- yo me duelo del àrbol
- pero no quiero confesar derrotas
- si ayer ella mi madre con la falda
escocesa
- que sonreìa en Mèjico al fondo del
retrato
- y ahora es esta criatura leve
- imaginando un àrbol donde apenas la
rama
-
- El gesto de mi madre se repite desde el
cicuenta y ocho
- cuando me alimentaba pulso firme
- ahora soy yo quien debe alimentarla
- no confieso derrotas
- sòlo me culpo de sus ojos tristes
-
- Con la humildad de siempre mi madre se ha
sentado a la mesa
- y hemos partido el pan en un alarde de
esperanza
- jugamos a reirnos
- a duplicar los peces con la risa
-
- Desde el cincuenta y ocho mi madre
desdibuja su ademàn
- yo levanto mi mano
- nos estamos naciendo.
-
- Agosto 1991
-
- SOLEDAD
-
- Esta playa inmensa, muerta,
- y solemne como un nicho
- es la soledad, capricho
- que del mundo nos deserta.
-
- Tiene cerrada la puerta
- a toda presencia, esquiva
- los encuentros; fugitiva
- de la sonrisa, desgarra
- la alegrìa y nos amarra
- de un madero a la deriva.
-
- Julio 1985
-
- ESA BESTIA FELIZ
-
- La gente
- esa bestia feliz a quien culpamos
- se nos sube de pronto a la cabeza como un
licor añejo
- para dejar de ser nuestra hidra de lerna
- o la gorgona que ha de petrificarnos
-
- se dulcifica entonces
- y es un pàjaro tibio
-
- nos volcamos en ella a contrapelo
- dicièndonos
- què bien còmo pude pensar que fuesen
lobos
-
- llevamos la cesta a la abuelita en medio
de ese bosque
- hasta llegar al punto de ojos tan grandes
tienes
- y què orejas enormes
- y què boca
- pero el lobo no llega a devorarnos
-
- Todo es el miedo de morirnos solos.
-
- Julio 1991
-
- MALEDICENCIA
-
- Nunca pierde la ocasiòn
- de atravesar los umbrales
- en su perenme misiòn
- de saber con presiciòn
- cuàndo llegas, cuàndo sales.
-
- Siempre viste su disfraz
- de recogida y discreta:
- bien maquillada la faz
- para ocultar lo falaz
- de su lengua de saeta.
-
- Octubre 1993
-
- MIS HERMANOS
-
- Mis hermanos no habitan ya en mi tiempo
- viven al otro lado de la suerte
- justo en el otro extremo del destino.
-
- Liaron los apuntes
- los sellos personales
- las reliquias
- tantos años de aplomo y continencia
- para invernar allende a la nostalgia.
- Amaron la partida con retazos de gloria
- creyendo que el contrario no ha marcado
las cartas
- esperando tal vez que èsta sea su hora de
fausto y artificio
- su hora de sentirse algo màs que ese rìo
- ese tropel difuso de pancartas por un
cauce de calles y avenidas.
-
- Mis hermanos no habitan ya mi tiempo
- viven al otro lado de la suerte
- sentados a la turca sobre el otro platillo
- inclinando hacia ellos el fiel de la
balanza
- sosteniendo la punta de la soga que me
corta el resuello
- y ante tanta evidencia me pregunto:
- ¿Es què son mis hermanos mis hermanos?
-
- Noviembre 1994
-
- LOS PUNTOS CARDINALES
-
- Siempre se dijo que eran cuatro
- los puntos cardinales
- y que la rosa naùtica valìa
-
- ahora
- marineros
- lancen al agua el artefacto inùtil
- pues no hay extremos tales a diestra y a
siniestra
-
- los puntos cardinales no son cuatro
- hay sòlo Norte y Sur.
-
- Febrero 1992
-
- DISQUISICIONES
EN LA FIESTA DE UN AMIGO
- A Juan Carlos Valls
-
- Ya no vale el saber
- si me avergüenzo de mi pobre riqueza
-
- He venido a la fiesta del amigo
- a compartir aquella gracia esquiva
- y he aquì que soy felìz
- como soldado sin un solo razguño
- como si fuese mucho esta felicidad de
pueblo chico
- entonces vienen otros en vuelo de ciudad
- son tal vez los amigos del amigo
- pero tienen un aire infundible de revista
de modas
-
- uno queda mirando su atavìo
- con pena de chiquillo endomingado y
lòbrego
- la cortedad primero
- despuès un dolor sordo movièndole a la
sombra de los muros
- y cuando arde la pena
- cuando teme la ofensa
- repara en la certeza de la idea
-
- ellos no son màs que payasos nobles
- enrarecido el corazòn de tanta multitud
desordenada
- pinceladas de los modos de otros
- eruditos de feria
- en cada vieja carpa la misma colecciòn de
frases
- una ferocidad de vendedores que al final
de la jornada
- logran sòlo vender el alma propia.
-
- Diciembre 1991
- Nota: Tomado del Libro CON
IRREVERENCIA Y GRATITUD, impreso en el poligràfico
"Pablo de la Torriente
Brau", Isla de la Juventud
-
- LLUEVE SOBRE LA CIUDAD
-
- llueve sobre la ciudad.
- Cada viernes el fantasma
- del vacìo: toses, asma
- - el bien de la voluntad-
- se marchan.
-
- Cierta humedad
- va empañando los espejos;
- nunca te sentì màs lejos,
- jamàs fue tal desamparo.
-
- El cielo en un lienzo raro
- (lienzo no, sòlo bosquejos).
-
- Todo se vuelve presagio.
- Los duendes parten contigo;
- cuando cierras el postigo
- nada detiene al naufragio.
- No fluye el tiempo. Mi adagio
- se acompasa en soledad.
-
- ¿Realidad? ¿Irrealidad?
- Todo es esta ausencia. Todo.
- Todo es nada en cierto modo.
-
- Llueve sobre la ciudad.
-
- Septiembre 1989
-
- HOMELESS
-
- Quizàs la almohada me guarda
- como ayer ese perfume
- tuyo. Mi lugar asume
- quien puede - tu pecho escarda.
- ¿Te inquietas cuando se tarda
- tambièn ella? Què vacìo;
- cuànto de bosque sombrìo
- enraizado en mi frente.
- Se diluye en el presente
- tu olor tan dulce, tan mìo.
- Cuànto de bosque sombrìo
- ronda mi mente.
-
- Necesito de la espera
- màs larga, de la llegada;
- la casa tibia, cerrada
- mundo que empieza en tu acera.
- ¿Què refugio, què frontera
- tengo ahora? soledades;
- cuànto de hirientes verdades
- viene a punzarme la frente.
- De tu sueño estoy ausente
- como de tus realidades.
- Cuànto de hirientes verdades
- ronda mi mente.
-
- ... Tu olor tan dulce, tan mìo
- como de tus realidades...
- Cuànto de hirientes verdades,
- cuànto de bosque sombrìo.
-
- Enero 1986
-
- ¿...?
-
- Tanto tiempo solos, tanto,
- al filo de otras miradas,
- con las alas desplegadas
- pero sin vuelo ni canto.
- Cuàntas ilusiones, cuànto
- soñar y esperar alertas.
- En las pupilas desiertas
- sòlo brumas, sòlo gris;
- llaga cada cicatrìz,
- sal en las venas abiertas.
-
- Ahora, còmo navegarte
- sin enturbiar tu corriente,
- còmo atravesar el puente,
- ser paloma y anidarte.
- Veràs: me queda una parte
- no lastimada, y espero.
- La otra mitad-- agorero
- soplo de muerte--la guardo.
- No plantarè un solo cardo
- que desgarre tu sendero.
-
- Octubre 1985
-
- SOLILOQUIO
-
- "Todos los que amabas
- se han dormido,
- Tù velas sin saberlo"
- Emilio de Armas
-
- Destella el sueño crispado
- la sordidèz, y trashuma
- por toda la casa: bruma
- que te devuelve al pasado.
- Ruedas a tu acantilado
- màs hondo. Cuando despiertas.
- son las visiones tan ciertas
- como el vèrtigo, fulgores;
- lacerantes resplandores
- en las pupilas desiertas.
-
- Entonces conjuro el verso
- que la vida necesita
- para su canto; se agita
- y el fragor queda inmerso.
- Por fin la paz. No converso
- con las viejas cicatrices.
-
- ¿Y el sollozo en que desdices
- tu olvido? ¿Se te ha escapado?
-
- Quièn sabe dònde ha volado
- con sed de sueños felices.
-
- Marzo 1986
-
- ECLIPSE
-
- "Se impedirà el nacimiento del
Ilimitado
- en el horizonte
- si me impides llegar al lugar donde
estàs."
- Textos de las Piràmides.
-
- Ya fue lluvia, ya fue sismo,
- fue rìo de agua quemante;
- ahora quietud, y el instante
- se convierte en espejismo.
- Viajo desde el polvo mismo,
- vengo desde una pradera
- lejana;Quizà pudiera
- pernoctar bajo tu brazo
- pero me cierras el paso
- con mòrbida enredadera.
-
- Ser cierto el espejismo
- si no me allanas el paso.
- Sè que habrà lluvia y ocaso,
- agua quemante y abisbo.
- Desatado el egoìsmo
- serà , preñadas las iras;
- aquelarre de mentiras
- ser su parto sangriento.
- Se impedirà el nacimiento
- del sol, si ya no me miras.
-
- Febrero 1986
-
- AFINIDAD
-
- Què bien con mis alegrìas
- se afinan tus amarguras
- y què bien de tus venturas
- se arpegian las penas mìas.
-
- Se crecen tus fantasìas
- con mi suspiro y mi gesto,
- con tu palabra protesto
- y susurro si me acudes:
- èsto es amor, no lo dudes,
- ¿Què, si no, puede ser èsto?
-
- Octubre 1983
-
- RELIQUIAS
- A Eusebio Leal.
-
- Guardo esta urdimbre de calles
- estrechas para tu paso;
- vuelvo a delinear el trazo
- màs antiguo, los detalles
- de una leyenda, los valles
- ungidos de fantasìa.
- Cuànto siglo de agonìa,
- cachaza, miel y negrero,
- barracones donde el cuero
- parece aullar todavìa.
-
- Guardo esta magia de añosas
- volantas, y de quitrines:
- huellas en los adoquines,
- quejidos en las baldosas.
- Tal vez la piedra en que posas
- tus plantas cubre un tesoro
- de antaño, polvo de oro,
- cargamentos de galeones
- para marquesas y dones
- --el nombre ilustre y sonoro--
-
- Permite, pues, que una frase,
- mientras andamos La Habana,
- nos descubra esa ventana
- o aquella verja. Quien yace
- bajo esta losa, renace
- entre alfèizares, dinteles
- columnas y capiteles,
- frisos, marcos, llamadores,
- en inmensos corredores
- o en un patio de laureles.
- Disfrutemos el encanto
- de algùn pregòn callejero,
- gracia de ropavejero,
- que cambia por dicha el llanto.
-
- Vamos a rastrear el canto
- del sereno y la rondalla;
- Presenciemos la batalla
- contra los casacas rojas.
- Ven, que ya cierran sus hojas
- las puertas de la muralla.
-
- Febrero 1989
-
- CURRICULUM VITAE
-
- Nombre y Apellidos: Felicia Hernàndez
Lorenzo.
- Fecha de Nacimiento y Provincia: La
Habana, 1957.
- Estudios relizados: Licenciada en Lengua y
Literatura Inglesa.
- Ha sido miembro del Taller Literario del
Municipio, del taller Literario de la Provincia La
Habana, de la AHS.
- Escribe poesìa y cuento. Ha obtenido
premios y menciones en ambos gèneros, en los niveles
Provincial y Nacional.
- Tiene publicado el cuaderno "Con
Irreverencia y Gratitud", Dècimas en el Centro
provincial del Libro y Literatura, Cuaderno "La
Puerta del Sol". Han aparecido trabajos suyos en
Revistas y Antologìas de Cuba y el Exterior.
- Direcciòn particular: Ave. 55 No 7610 e/
76 y 82 Güines. La Habana. CP: 33900. Cuba.
- INDICE
ARCHIVO LITERATURA N°1